jueves, 4 de junio de 2009

TIANANMEN a 2o años de la masacre

20 años después de la represión al movimiento pro-democrático, integrado en su mayoría por estudiantes, artistas y escritores, que culminó con la despiadada y cobarde matanza de la plaza Tiananmen en Pekín, las cosas en China siguen igual en el renglón de la libertad de expresión y derechos humanos.

La repression a las libertades individuales y a los medios de información en china está igual, o más presente –aunque con algunass “sofistificasiones” y make-ups- para “diferenciarse” de la era negra del gobierno de Mao Tse Tung.

El partido comunista chino –tal vez con algunas excepciones, como las hubo durante las protestas de 1989- sigue con la misma postura intransigente de no reconocer los crímenes cometidos en la plaza Tiananmen, al contrariio, con toda arrogancia y despótica prepotencia afirma Qin Gang, portavoz del ministro del exterior: “ los disturbios del 4 de Junio de 1989 fueron abiertamente contra-revolucionarios…”. Lo mismo dijeron las autoridades mexicanso –sólo que con otras palabras- al referirse a la massacre de Tlatelolco en 1968. Pero nosotros sabemos –que en ambos casos, y en otros similares- se trata de de genocidios INJUSTIFICABLES y hasta la fecha impunes. Nosotros sabemos, como bien lo canta en su poema Volker Schüler-Will:
Cayeron sobre una dura y gris almohada
emplazada en el nombre de perpetua paz.

Entre los exilados que participaron en las protestas pro-democrácia en Tiananmen destacan los miembros del grupo Misty Poets, en Europa, y en Australia, Ouyang Yu,poeta contestatario y buen traductor. M.L.C.




CUANDO LOS HOMBRES RABIAN IMPACIENCIA

Volker Schüler-Will

Bremen, Alemania), 1942. Estudió Filosofía en Erlangen, Alemania, y en Viena, Austria. También realizó estudios de Literatura Comparada en Berkeley, USA. Fue MTC-Investigador en el Departamento de Literaturas Hispánicas de la Universidad de Sonora. Murió en el año 2003 y es uno de los pocos "yoris", me atrevería a decir el único, sepultado en el Huirivis, tierra sagrada yaqui.


Tien an men, junio 89

Cuando los hombres rabian impaciencia
cuando tienen que esconder sus esqueletos
entre bicicletas en lo llano del enser,
cuando un joven
tiene que querer
torear tortugas
que avanzan con la certidumbre lenta
de los asesinos que a sabiendas juegan
se hace una plaza que no cabe en sí.
(¿Y qué dice el general
cuando los soldados lloran?)

Escucha, aquí habla la metralleta,
la bayoneta a lo mejor
que puede ser, aquí se aplastan los comienzos,
la belleza que se mueve en lo joven
más que en las mariposas y sauces llorones
del Taing y del Sung
y todos esas otras rimas de acero milenario
con las que se afeitan los estetas del orden
para no perder su cara lisa y homicida.

Cayeron sobre una dura y gris almohada
emplazada en el nombre de perpetua paz.

Recordemos al pueblo de Beijing
que supo dar su cuerpo como valla
y a ese compañero chino
que montó el momento,
que montó la tortuga implacable,
¿quién no los va a recordar?

No solamente corre esta sangre,
salta,
hace,
hará memoria.


Fuente del poema: White Feather Antology (la otra poesía sonorense), selección de Raúl Acevedo Savín, Ediciones El Zapo, 1993, Hermosillo, Sonora, México.

2 comentarios:

Pina dijo...

Qué diría el Volker si ahora estuviera
qué opinaría de este crimen 20 años después de Tiananmen... pero con niños.

Un abrazo, Mario.

Mario Licón Cabrera dijo...

Qué pensaría? Habiéndolo conocido bein, el Volker hubiera tirado patadas conta cielo y tierra de indignación, querida Pina.

Un abrazo cariñoso.

elmariotriste.